José Barta; 1 de agosto 2014
Así llegan a calificar al Papa Francisco algunos Conservadores norteamericanos, debido a sus descalificaciones sobre toda política económica desarrollada en beneficio, principalmente, del sistema financiero, con grave desprecio del respeto por la dignidad de la persona, y su consiguiente desarrollo como tal.
Gonzalo Garteiz , periodista que día a día va ganando mi mayor respeto, en un nuevo artículo en La Celosia, titulado El mensaje económico del papa Francisco choca con los republicanos de Estados Unidos, descubre cómo, en un hecho sin precedentes, la Cámara del Congreso de los EEUU no felicitará al Papa, por su elección y por ser fuente de inspiración con sus mensajes sobre ética económica, debido a la oposición de la gran mayoría de los congresistas republicanos.
Recomiendo la lectura de este artículo, en el que se pone también de manifiesto como, por parte del “sistema”, en España se mantienen posiciones similares, a la de esos congresistas norteamericanos.
Personalmente estoy siendo testigo de las prevenciones, en su mayoría en forma de descalificaciones intelectuales – ¡por parte de un país que no ha sido capaz de generar una sola idea novedosa en economía, tras las aportadas por nuestros escolásticos tardíos, en los siglos XVI y XVII! – de algunos académicos y grandes empresarios y directivos de importantes empresas, muchos de ellos autoproclamándose “católicos”. Me recuerdan a Emilio Castelar intentando desacreditar a Leon XIII, tras escribir la Enciclica Rerum Novarum, instándole a escribir sobre cosas de las que entendiera. Parece que la Historia ya ha puesto a cada uno en el lugar que le corresponde, y don Emilio se ha quedado en nombre de simple glorieta.