Milton Friedman no fue un mero economista brillante, sus raíces judías, las dificultades económicas de su familia, agravadas por la muerte prematura de su padre, y el drama social que originó la crisis de 1929 en USA, le convirtieron en un apasionado defensor de la dignidad de toda persona, y por ello de la equidad social que presupone la libertad de cada una de ellas. Y concluyó que sin libertad económica no es posible la libertad social, ni la política.
Entrevista realizada a José Barta sobre Milton Friedman